Lidiar:
1.-Luchar con el toro incitándolo y esquivando sus acometidas hasta darle la muerte.
2.-Batallar, pelear.
3.- Hacer frente a alguien, oponérsele.
"se puso como pudo, el toro lo miró, de repente con un leve movimiento un gargajo le vino y se le situó en su misma cara, un escalofrío le recorrió...ya no podía pensar... pero sí, tenía la muleta y su espada..."
Un saludo.
1.-Luchar con el toro incitándolo y esquivando sus acometidas hasta darle la muerte.
2.-Batallar, pelear.
3.- Hacer frente a alguien, oponérsele.
"se puso como pudo, el toro lo miró, de repente con un leve movimiento un gargajo le vino y se le situó en su misma cara, un escalofrío le recorrió...ya no podía pensar... pero sí, tenía la muleta y su espada..."
Un saludo.
Efectivamente, Juan Arolas, el Toreo es una escuela de vida, quizás la escuela existencial más refinada que se conoce y todo aquel aficionado que no entienda así el enfrentamiento del Hombre con la Bestia, va de culo.
Lo difícil es aplicar la lección recibida cada tarde en nuestra batalla diaria, con la particularidad de que en la vida cotidiana de cada uno de nosotros unas veces tienes que ser toro y otras veces persona (torero).
Hasta otro rato, muchachos, volveré por aquí de lleno no tardando mucho, ahora estoy más liada que la pata de un romano.
La condesa de Estraza
Lo difícil es aplicar la lección recibida cada tarde en nuestra batalla diaria, con la particularidad de que en la vida cotidiana de cada uno de nosotros unas veces tienes que ser toro y otras veces persona (torero).
Hasta otro rato, muchachos, volveré por aquí de lleno no tardando mucho, ahora estoy más liada que la pata de un romano.
La condesa de Estraza